Por Rafael Calderón*

Aclaro que la expresión no es mía. La escuché en un reportaje histórico sobre la crisis económica de 2001 en Argentina, que lamento no haberlo visto completo, porque lo que oí en el fragmento que vi bien puede ser una profecía de a donde es que va a desembocar nuestra República Dominicana con la acelerada carrera de endeudamiento a que está sometida. Por ello, me animé a usar la frase.
Así que cuando Menem entregó el mando a Fernando de la Rúa lo que en realidad le entregó fue la “vejiga” a que hice referencia en el primer párrafo. A De la Rúa no le quedó de otra que seguir cogiendo prestado, pero el FMI tenía sus reglas y sus límites y llegó un momento en que le trancó el juego a los argentinos. Lo que se armó allá, dicho de manera simple, fue la de no te menee, con el pueblo pagando por los platos rotos por sus gobernantes.
La vejiga dominicana está ya muy inflada y de aquí a mayo 20 se agrandará mucho más, porque el gobierno está empeñado en la compra de las elecciones y con seguridad que los $40 mil millones que anunció Leonel que gastará con ese propósito no van a ser suficientes.
Mientras tanto, pensemos en lo que nos espera para ver como es que el país va a ajustar cuentas con los actuales gobernantes, de cuyo enriquecimiento se habla en términos de miles de millones de dólares, cosa que ellos ni se molestan en esconder.
Por hoy, me voy. Que Dios le llene de bendiciones, y se apiade de la República Dominicana.
-------
*Periodista dominicano residente en Nueva York.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario