Por Rafael Calderón*
El prolongado ejercicio inescrupuloso
del poder y la cercanía de su hora final en el mando ha acabado por completo
con la cordura del doctor Leonel Fernández y, por vía de consecuencia, del
partido de su propiedad, de los congresistas de su propiedad, de los
diplomáticos de su propiedad, de la prensa de su propiedad y de sus seguidores.
Aunque el doctor Fernández se cuida de
no aparecer -casi siempre sale de viaje- cuando su gobierno protagoniza
acciones descabelladas, no podrá librarse del juicio de la historia. Y en los
capítulos que contengan los desaciertos de su régimen el “desagravio” al
presidente Barack Obama y la “conspiración” de Pepe Goico aparecerán como la
mayor imprudencia y la mayor ridiculez cometidas en el campo internacional.
No cabe duda de que la cercanía del 20
de mayo tiene a Leonel y los suyos en estado de frenesí. Eso explica el
arrebato con que fue anunciado el supuesto “desagravio” por el presidente del
senado, Reynaldo Pared Pérez. Además, indica que la alta dirigencia del PLD
asume con atrevimiento increíble que el presidente Obama debe estar tan mareado
por las alturas del poder como lo están ellos, razón que los puso a pensar que
éste debe ofenderse si le recuerdan su origen ancestral.
Renegados como son los dirigentes
peledeístas de su doctrina política y del componente negro que hay en la mezcla
de razas que tenemos los dominicanos, Leonel no dudó en darle pa’lante, por
boca de Pared Pérez, al pretendido “desagravio”, que, visto desde la
perspectiva de la cordura, es un agravio frenético al continente de África, a
los negros que estamos regados por el mundo y a los propios ancestros del
mandatario criollo y sus vasallos.
Leonel Fernández y Reynaldo Pared Pérez |
¿Y qué decir del mamotreto de rueda de
prensa, sin derecho a preguntas por parte de los periodistas, para anunciar que
Pepe Goico va a tumbar el gobierno de Haití? ¿Puede concebirse algo más
ridículo que juntar en una mesa al canciller Carlos Morales Troncoso, al
secretario de prensa del gobierno, a un par de embajadores y a un par de
ministros de justicia para poner a los periodistas a escuchar una conversación
trivial gravada de manera ilegal?
En las fotos publicadas del infeliz
encuentro el patetismo de los rostros de los juntados era provocador de
carcajadas tristes. Lo cierto es que a Leonel no lo conmueve nada, porque poner
a tanta gente a hacer el ridículo es propio de una mente insensible.
Que yo sepa, es la primera vez que
representantes de dos gobiernos son juntados para que hagan el ridículo público
de anunciar al mundo de manera oficial que alguien está conspirando para
derrocar a un presidente y a ese alguien, que no está en la clandestinidad, que
tiene domicilio conocido y que camina a la vista de todos, no se le apresa y ni
siquiera se le interroga para impedir que materialice el macabro plan que le
atribuyen las autoridades.
¿Qué más nos harán ver de aquí al 20 de
mayo los desaforados dirigentes del PLD, en su intento de impedir que el pueblo
los desaloje del poder? Debemos prepararnos para cosas peores, pues de mentes
asustadas, en estado febril, no puede salir nada bueno. Quienes se atreven a
tirar una pará como la del “desagravio” al presidente Obama son capaces de
cualquier cosa horrenda, guiados por su insano juicio.
Por hoy, me voy. Que Dios le llene de
bendiciones, y se apiade de la República Dominicana.
---------------
*Periodista dominicano radicado en Nueva
York
No hay comentarios:
Publicar un comentario